La vivienda panorama vegetal presenta varias características que la hacen adaptable a los criterios del urbanarbolismo: redefine el concepto de parcela, utiliza la piscina como sistema de climatización de la vivienda, su cerramiento lo constituyen los arboles circundantes, utiliza el agua de depuración para crear el bosque circundante y capta agua de niebla.
La principal característica la redeficición del concepto de parcela. Tradicionalmente las viviendas se han ubicado en parcelas: “espacios de terreno pertenecientes al propietario para su uso y disfrute”. Debido a los niveles de evapotranspiración necesarios para que la urbanización provoque lluvia las parcelas donde se asientan las viviendas no son propiedad de los propietarios de las viviendas sino que son gestionadas por la comunidad de la urbanarbolización, el objetivo de estas parcelas es generar la mayor evapotranspiración posible y un espacio natural protegido que constituye el entorno donde los habitantes de la urbanarbolización desarrollan su vida social.
El cerramiento de la vivienda lo constituyen arboles autóctonos de rápido crecmiento, hoja caduca y gran capacidad de evapotranspiración. En este caso se han elegido Chopos. Estos arboles se riegan con el agua resultante de la depuración de aguas grises de la vivienda y son gestionados comunitariamente. El control climático de la vivienda y en parte su intimidad depende de estos arboles, de esta manera se establece una relación directa entre los usuarios y el bosque creado.
La tipología de vivienda constituye una suma de las viviendas SU-SI y la casa Latapie. La vivienda se eleva sobre el terreno impermeabilizando la menor cantidad de suelo posible.